Verano en la Costa Cálida

Sábado 7 de Julio, 00:30 horas. Aeropuerto de Gran Canaria.
A esta hora llego al aeropuerto con la intención de facturar mi equipaje y comenzar mis vacaciones, en Murcia, en plena Costa Cálida.

En unos pocos minutos facturación OK, aunque no todo iba a comenzar bien, el personal de handling de Iberia nos comenta que nuestro vuelo el IB6971 (Si no recuerdo mal) procedente de Dakar, con escala en la isla y destino Madrid, tiene varias horas de retraso, por lo que en vez de a las 03:30 de la madrugada, saldremos a las 05:30 como mínimo. El enlace con el vuelo Madrid <> Alicante lo perderíamos por lo que nos lo pasarían para el siguiente vuelo a la Costa Blanca, a mediodía.Tras pasar el control de seguridad la noche transcurre bastante tranquila, el nuestro era el único vuelo que llegaba durante la madrugada, por lo que apenas había movimiento en la terminal de salidas nacionales/internacionales.

Sábado 7 de Julio, 04:00 horas. Aeropuerto de Gran Canaria.
En las pantallas de información de vuelos aparece un desesperante “Retrasado/Delayed” y una hora estimada de salida, las 05:30. Mientras, un empleado abre el Starbucks que tenemos junto a donde estamos sentados y comienza a notarse más movimiento, varios grupos de turistas, principalmente británicos, empiezan a pasar el control de seguridad, ya que a primera hora de la mañana comienzan a operar los vuelos de Ryanair. A las 04:30 cambian la hora de salida a las 06:00

Sábado 7 de Julio, 05:00 horas. Aeropuerto de Gran Canaria.
A esta hora anuncian por megafonía que los pasajeros del vuelo IB6971 pueden pasarse por  información de Iberia para obsequiarles con un vale para un refrigerio. Los 10 euros del vale apenas me dieron para una botella de Fanta de Piña, a decir verdad era la primera vez que probaba un refresco de este sabor, y un bocadillo, que, después de la noche que habíamos pasado, sentaron bastante bien.

A continuación nos dirigimos a la puerta de embarque, antes de entrar a la zona donde se encuentran las puertas, un agente de la Policia Nacional revisa los DNI’s/Pasaportes. Ya estamos dentro, pasados unos minutos de las 05:30 aterriza el Airbus a321 de Iberia.


Tras una casi una hora que se hace eterna, a eso de las 06:30 ya estamos embarcando. A medida que me acerco al avión y subo las escaleras hasta el interior me asaltan las clásicas, pero verdaderamente preocupantes, dudas de ¿Y cómo va a volar esto, y como va a mantenerse en el aire? al más puro estilo ‘Aqui no hay quien viva’ , porque volar entre volar en un ATR72 de Binter y hacerlo en un bicho de estos, hay bastante diferencia. Una vez acomodado en el que será mi asiento durante las próximas 2 horas y media, saco el libro que tengo previsto para el viaje, ‘No abras los ojos’. Despegamos. El insoportable sonido de las turbinas del avión hace imposible cualquier cosa que no sea dormitar.

Sábado 7 de Julio, 10:08 horas. Aeropuerto de Madrid-Barajas
Tras casi tres horas, ya estamos en Barajas. En el recorrido entre la pista de aterrizaje y la pasarela que lleva a la T4S echo un vistazo al recinto aeroportuario, decenas de aviones de Iberia se ven por cualquier sitio al que miro. Llegamos a la pasarela. Ya en la terminal satélite, una azafata de la compañía busca a los viajeros de mi vuelo que tomarán otro rumbo a Miami, al grito de “¡Miami, Miami!
Iluso de mi si creía que esta iba a ser la única bienvenida que nos darían.
Nada mas pisar suelo madrileño dos agentes de la Policía Nacional, piden la documentación al grito de “¡DNI, Passport!”, al ver que yo no tenía intención alguna de enseñar nada a los agentes, uno de ellos elevó la voz, para cuando tenía el DNI en la mano rectificó con un…“Nada nada, que vienen de Las Palmas”. A lo que le respondemos: “De Gran Canaria”, pero el agente no se iba dar por vencido, y nos replica con un “Pero el aeropuerto está en Las Palmas”, grave error el suyo, ya que se encuentra en Telde, y así le corregimos.Tras “Bueno, bueno” por parte del agente continuamos, acompañados por un grupo de viajeros de Gran Canaria que también perdieron el enlace con Alicante.

Nos cruzamos con un mostrador de Iberia, en el que nos comentan que no hay plazas para el vuelo a mediodía de Iberia Express hasta la ciudad valenciana, por lo que nos dan un vale para una noche de hotel y un vuelo con el mismo itinerario para la mañana siguiente.

Tras reclamar inútilmente otra solución a nuestra querida compañía, decidimos continuar nuestro viaje en guagua, por lo que tras recoger las maletas subimos a un taxi en el que recorremos los casi 30 kilómetros que separan el centro de Madrid de Barajas.

Sábado 7 de Julio, 12:04 horas. Estación de guaguas Madrid Sur (C./Méndez Álvaro, 83)
Hasta llegar a la Estación de guaguas del sur de Madrid pasamos por lugares emblemáticos de la Capital, como el pirulí (Torrespaña) y los estudios centrales de los informativos de Televisión Española, ambos junto a la M-30. Ya en la estación, en Méndez Álvaro, compramos los billetes de guagua hasta Murcia, me llama la atención el elevado número de personas sudamericanas que encuentro en la estación. Una vez comprados los billetes había que esperar mas de media hora para partir. A las 13:00 subimos a la guagua que nos llevaría hasta nuestro destino final, por fin. Por delante nos esperan 5 horas de viaje, con una única pausa en Albacete para el cambio de chófer.

Sábado 7 de Julio, 12:04 horas. Estación de guaguas Albacete (C./Federico García Lorca, 5)

Allí llegamos a eso de las 16:20, el calor en la ciudad castellano-manchega se hace notar con un aire caliente que no invita a salir a la calle. Aún nos quedaban dos horas para llegar a la capital murciana, terminamos nuestro viaje a las 18:20.

Para ser mi primer viaje fuera de las islas, tampoco estuvo tan mal, ¿No? ;-)